El Valeri Vasiliev salió de Arcángel, al norte de la Rusia europea, cargado con 15.000 toneladas de tubos de acero. A la semana siguiente llegó al puerto de Sabetta, al norte de Siberia, con las manos vacías. Lo que ocurrió en alta mar no es ningún secreto gracias a un marinero que grabó todo sin parar de insultar.
Este era el aspecto del buque de carga cuando salió del puerto de Arcángel:
Quedaban 13 horas para llegar a la península de Yamal cuando las cintas que sujetaban la carga cedieron y los tubos fueron a dar al océano Ártico:
El mar no estaba tranquilo, pero tampoco furioso. Sencillamente, alguien no había hecho bien su trabajo al asegurar la carga. Entre palabrotas y blasfemias, el ruso que graba se queja de los imbéciles que inspeccionaron los amarres. Al final se lo toma con humor y, mientras sujeta estoico la cámara, anima a los últimos tubos a rodar hasta el mar. Los chapuzones son espectaculares.
Si pensabas que estabas teniendo un mal día en el trabajo, piensa en estos rusos. O mejor, grábalo todo. Podrías hacerte viral. [Reddit vía BoingBoing]